Cuando la internacionalizas 

Si bien las mujeres en ocasiones se entregan al "amor" y se lo da al primero que les promete y le dices cosas hermosas, endulzando el oído de aquella doncella que solo se ha metido con dos en su vida... Pero como nos suele suceder volvemos a caer, es más encantador cuando alguien a parte de decirte cosas "divinas, preciosas y tentadoras" te lo dice en otro acento. 

Ayyyyy Caramba, que delicia el tonito extranjero, que excitante cuando susurran en la oreja y aún mejor cuando pagan la cuenta. 

Esta es la historia de una prima de la mejor amiga de mi amiga de mi primer trabajo. Un día estaba sentada almorzando cuando empezamos a hablar de ello y me enteré de esta historia tan intensa pero que siempre ha marcado mi curiosidad. 

Estaban en una partyhouse con mínimo 10 hombres y como 20 mujeres (jajaja suele suceder), de repente esta  amiga se ha dado cuenta que todos los hombres con los que había llegado a tener diálogo tenían algo en particular, eran españoles... 

Ella jamás había rumbeado con extranjeros, es más creo que todas compartimos una percepción inicial y es que son como desabridos, en fin, la amiga cuando vio que aparte de españoles la gran mayoría de estos hombres estaban muy buenos. Ella le llamó la atención un "hermoso, divino, precioso" llamado Piqué (jajaja tampoco sé el detalle del nombre, pero mi referente español es este jugador, además terminó metido con Shak, una hermosa colombiana) .

Piqué y la amiga se hablaron toda la noche, reían y jajaja se manoseaban, de un momento a otro entraron a un cuarto, la calentura era tan heavy que la amiga mojó cuco y este caballero se ha dado cuenta, uyyyy, uyyy, uyyy . Piqué la llevó para el baño y ahí ha hecho y desecho con la amiga que muy amablemente ha abierto sus piernas y su vagina para que este hombre le meta su "hermoso, divino, precioso" miembro.  

El punto es que después de la comida tan impactante que sostuvieron en el baño, esta amiga ha quedado lista para la noche de rumba... De repente Piqué ha salido y sin tapujo, sonrió a sus amigos, como quién dice "ya cayó otra más", "latinas deliciosas pero muy fáciles"  y se fue a hablar con otra mujer. 

La amiga quedó como un zapato por que en toda la noche este hombre no le dio ni la hora y mucho se "lo volvió a dar". 

Moraleja de la historia, más vale colombiano mal polvo que extranjero cabrón. 

By  La Wise